Pasa saber cómo debes manejar tu dinero, es necesario aprender y aplicar algunos hábitos, así podrás tomar decisiones que te permitirán gozar de una gestión de capital óptima, e incluso la oportunidad de generar mayor riqueza a largo plazo.
Inicia un control de gastos y crea un presupuesto
Para que éste hábito sea efectivo, necesitas incluir todos los gastos que realices… Todos… Desde el contrato con el cerrajero para instalar una cerradura, hasta la galleta que le compraste a tu hijo para la merienda.
Así podrás analizar, en qué has gastado el dinero, y cuáles son los gastos que no son prioridad.
Para llevar este control de gastos, te recomendamos anotar la fecha del gasto, el importe, el método de pago utilizado y la razón por la que hiciste ese gasto. Clasifica todo por categorías, por ejemplo, alimentación, servicios, traslados, por dar algunos ejemplos.
A partir de estos datos, ya podrás definir cuáles son los gastos regulares en cada mes. Es importante mencionar, que tus gastos nunca deben superar tus ingresos, porque, inevitablemente, vas a comenzar a adquirir deudas.
Crea un plan de finanzas y metas financieras
Con el presupuesto, tendrás el conocimiento acerca de cuál es tu capacidad financiera disponible, luego de cumplir con tus responsabilidades mensuales. Esta información te será de utilidad y podrás definir metas financieras a futuro.
Algunas de las metas financieras a las cuales deberías dar prioridad, es la liquidación de deudas y evitar adquirir nuevas.
Al liberarte de estas responsabilidades, tendrás, aparte de la tranquilidad, la libertad de poder plantear nuevas metas financieras, como hacer un viaje de vacaciones, hacer el primer pago de un coche, entre otras.
Ahorrar
Crea un plan de ahorros, y evitar hacerte trampa. No es necesario que al principio sean grandes cantidades, recuerda que es un nuevo hábito y puedes requerir algo de tiempo para acostumbrarte.
De tu ingreso mensual, bien sea que provenga de un salario, si tienes un negocio o cualquier ingreso que poseas, reserva un pequeño porcentaje, que sea intocable, esto te va a ser de gran ayuda para alcanzar las metas financieras de las cuales se hizo mención anteriormente.
Asimismo, puedes destinar parte de tus ahorros para hacer frente a cualquier urgencia, recuerda que no estamos exentos de eventos inesperados, que puedan ocasionar gastos adicionales, que obviamente no están incluidos en tu presupuesto mensual.
Anímate a invertir
Esto es muy fácil de decir, sin embargo, no es una decisión que debas tomar a la ligera. Recuerda que la inversión es una manera de utilizar tu dinero en algún proyecto o negocio, que te permita, no solo la recuperación del capital, también percibir una ganancia por ello.
Antes de decidir en qué invertir, te recomendamos que analices algunos aspectos como el plazo del proyecto, calcular el rendimiento que esperas recibir, y el nivel de riesgo que existe, pues, toda inversión siempre tiene que enfrentar riesgos.
La intención de una inversión, es que sin dejar de percibir tu ingreso mensual, puedas lograr que de manera simultánea tus ahorros se reproduzcan.
Existen muchas opciones de invertir tu dinero, entre los más seguros están los depósitos a plazo fijo, fondos de inversión. Otros con un nivel de riesgo mayor, invertir en el mercado de valores o iniciar tu propio negocio. Pero la decisión va a ser de acuerdo con los análisis que hayas realizado al respecto.